Directora de Marketing y Producto de la División Bosch Home Comfort Group España y Portugal
Se habla desde hace tiempo de la importancia de la rehabilitación y la eficiencia energética como palancas necesarias para un cambio estructural en el sector. ¿Cuál es su opinión sobre el momento actual del mercado? ¿Hemos avanzado lo suficiente durante los últimos años?
La importancia de la rehabilitación en cuestiones energéticas es una realidad ya que más del 50% de las viviendas en España fueron construidas antes de 1980, careciendo de normativas sobre eficiencia energética.
El 84,5% de los edificios en España tiene etiquetas E, F o G que responden a una baja eficiencia energética, y muestran la radiografía de un parque inmobiliario antiguo e ineficiente que tiene la necesidad de ser reformado y es que es esencial para el proceso de descarbonización en Europa, que se adopten medidas de eficiencia energética, reducción de emisiones e implementación de sistemas eficientes. Este enfoque no sólo impulsa el cumplimiento de objetivos climáticos, sino que también revitalizaría el mercado.
Desde Bosch apostamos por el crecimiento de la rehabilitación de los edificios en los próximos años, con una reposición significativa de sistemas de calefacción y agua caliente sanitaria por sistemas más eficientes como calderas de condensación. Asimismo, la bivalencia de las soluciones de ACS y calefacción con sistemas de bomba de calor, y gases renovables se postulan como soluciones a corto y medio plazo en el escenario de la rehabilitación.
Los objetivos de la Unión Europea son muy ambiciosos en el horizonte 2030 y 2050 en rehabilitación energética, lo que también supone una oportunidad para el desarrollo del sector. ¿Cuál cree que será el devenir de la rehabilitación, la reforma, la eficiencia energética y las instalaciones a medio y largo plazo? ¿A qué desafíos se enfrenta?
Durante el pasado 2023, hemos podido observar una clara tendencia hacia la búsqueda de soluciones más eficientes en el sector de la edificación. Las constantes subidas en los precios del gas y la electricidad han impulsado una diversificación del conjunto de soluciones de ACS y calefacción hacia soluciones innovadoras.
Por ello, cada vez es más importante la aparición de nuevas normativas y regulaciones en el ámbito de la UE, encaminadas a la eficiencia energética y la reducción de emisiones, promoviendo para cada instalación concreta el sistema más eficiente. Es particularmente en el sector de la reforma o rehabilitación, es donde se presentan los mayores retos, en España se planea alcanzar la rehabilitación de 1.200.000 viviendas para el año 2030 según Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2021-2030.
Nuestra gama actual de calderas juega un papel clave en la sustitución de calderas antiguas por calderas de condensación de mayor eficiencia, que junto con controladores modulantes permiten llegar una eficiencia energética A+. Además, están preparadas para funcionar con mezclas de gas natural e hidrógeno hasta del 20%. En el momento que se cuente con esta mezcla de hidrógeno en la red de gas, las calderas Bosch pueden convertirse y ajustarse sin necesidad de cambio de sistema, facilitando la descarbonización en los edificios y la optimización de las infraestructuras energéticas, por el cambio de los sistemas de calefacción convencionales de gas natural a los de hidrógeno.
Bosch también está haciendo inversiones en sus plantas e invertirá 1.000 millones de euros hasta finales de la década en el mercado de bombas de calor, apostando por esta solución como herramienta para contribuir al nuevo modelo energético de los hogares de los próximos años. Un modelo que en nueva edificación está siendo posible gracias al Código Técnico, que establece que una de las medidas para reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera pasa por el mayor aprovechamiento de fuentes de energía renovables donde la bomba de calor se ha convertido en protagonista. Además, en rehabilitación, la bomba de calor puede coexistir junto a las calderas de condensación existentes, funcionando como sistema híbrido.
Esta combinación es un primer paso para reducir la dependencia de los combustibles fósiles en instalaciones existentes, con una optimización de la eficiencia energética. Porque los sistemas híbridos permiten combinar generadores de calor tradicionales de combustibles fósiles, como calderas de gas o gasóleo, con sistemas de fuentes de energía renovable, como las bombas de calor aerotérmicas.
También se observa un crecimiento en la demanda de servicios de rehabilitación energética, impulsado por la creciente conciencia de sus beneficios a largo plazo. La inversión en la rehabilitación energética de edificaciones conlleva ventajas significativas, incluyendo la disminución del consumo de energía, las emisiones de CO2 y los gastos asociados a la calefacción y refrigeración. Este aumento en la demanda abarca tanto a propietarios de viviendas como a empresas, quienes reconocen la importancia de mejorar la eficiencia energética de sus propiedades.
Además, el panorama de la rehabilitación energética se ve influido por el constante desarrollo de nuevas tecnologías y materiales. La evolución tecnológica desempeña un papel crucial al permitir mejoras continuas en la eficiencia energética de los edificios. En los próximos años, anticipamos la aparición de soluciones innovadoras que no sólo optimizarán los procesos de rehabilitación, sino que también harán que estas iniciativas sean más rentables y sostenibles a largo plazo.
Uno de los principales problemas más acuciantes del sector es la falta de mano de obra, en buena medida por la falta de relevo generacional. ¿Cómo cree que se podría paliar esta situación y atraer talento y mano de obra a nuestro mercado?
La falta de mano de obra en el sector se trata de una problemática real no sólo en España sino en toda Europa. La edad media de profesionales del sector es elevada, y esta tendencia puede mantenerse en los próximos años. Para paliar esta situación, es necesario tomar medidas que fomenten el relevo generacional y atraigan talento y mano de obra cualificada a nuestro mercado. Estas medidas no sólo deben enfocarse en comunicar la importancia del sector entre los más jóvenes, sino también las oportunidades que este ofrece en relación con su desarrollo profesional, fomentando además la diversidad con la inclusión de las mujeres en el desarrollo de esta actividad en el sector, que apenas cuenta con un 5% y se encuentra invisibilizada.
Además, incentivar la colaboración entre las empresas del sector y las instituciones educativas para desarrollar programas de formación adaptados a las necesidades del sector puede resultar interesante. En este sentido, en nuestra División Bosch Home Comfort, hemos inaugurado recientemente un centro de formación en Madrid que forma parte de un nuevo edificio destinado exclusivamente a la formación de profesionales del sector de la calefacción, la climatización y el ACS y también de los sectores del automóvil, herramientas eléctricas y sistemas de seguridad, englobando al conjunto de divisiones de la compañía.
Desde Bosch reafirmamos nuestro compromiso con la preparación y actualización de los profesionales de las instalaciones térmicas, especialmente frente al reto de cambio tecnológico que lleva consigo el proceso de transformación energética que se está viviendo.