En el sector de la construcción, donde las mujeres representan menos del 10% del total de ocupados, la digitalización se vislumbra como una herramienta esencial para atraer más mujeres a esta industria. Según una encuesta realizada por la plataforma para la mejora del hogar, habitissimo, el 61% de las mujeres que trabajan en el sector de la construcción considera que la digitalización es “imprescindible” para sus negocios.
Este dato, que fue presentado en el marco del Día Internacional de la Mujer celebrado el pasado 8 de marzo, subraya la importancia de la digitalización en la economía y la sociedad en general, especialmente para las mujeres trabajadoras. La tecnología está allanando el camino para que más mujeres se incorporen a sectores que tradicionalmente se consideraban dominados por hombres. Según explican desde habitissimo, “en el pasado, la construcción era vista como un trabajo para hombres al que las mujeres tenían un acceso limitado. Sin embargo, esta situación está cambiando y cada vez más mujeres están ingresando en la industria de la construcción y ocupando puestos de liderazgo”.
Dicho aumento de la participación se debe, según señalan, a factores que incluyen además de la creciente digitalización, un cambio positivo en la percepción de las mujeres en la sociedad; el fomento de la inclusión y diversidad por parte de las empresas; así como la demanda de trabajadores cualificados en la industria. En línea con esto, un informe de la National Association of Women in Construction devela que el 89% de las empresas de construcción encuestadas tienen políticas específicas para la inclusión de mujeres en la fuerza laboral.
En España, este último año, la representación femenina en el sector de la construcción se ha mantenido estable representando de media un 9% del total de ocupados del sector, según la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE). Esto se traduce en una media de 120.425 mujeres empleadas en la construcción, frente a 1.240.730 hombres. Aún así, si comparamos la presencia de la mujer en 2023 con el año anterior podemos observar un leve crecimiento de la presencia de la mujer, de un punto porcentual, lo que se traduce en 17.100 mujeres ocupadas en el sector.
Ante este crecimiento tan paulatino de la presencia de la mujer en el sector, desde la plataforma habitissimo también señalan que “aún queda mucho por hacer para atraer y retener el talento femenino, así como para impulsar de manera más dinámica la participación de las mujeres”. Es por este motivo que la digitalización emerge como una herramienta poderosa para fomentar su presencia en diversos ámbitos de la construcción. La digitalización no solo facilita el acceso a la educación y capacitación en habilidades técnicas e ingeniería para las mujeres, sino que también genera entornos laborales más flexibles y remotos, lo que contribuye a superar las barreras logísticas y de accesibilidad que históricamente han limitado su participación en ciertos campos.
No obstante, es fundamental tener presente que la mera adopción de tecnología no garantiza automáticamente un incremento en la participación femenina. Desde habitissimo advierten que se requieren políticas y prácticas inclusivas que aseguren que las mujeres puedan aprovechar plenamente las oportunidades digitales disponibles. Persiste una brecha digital de género, reflejada en las disparidades en el acceso, uso y dominio de la tecnología entre hombres y mujeres, resultado de diversas causas como la falta de acceso a educación tecnológica para las mujeres y los estereotipos de género que desalientan su incursión en áreas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas). Y es que, según los datos del Instituto Nacional de Estadística, solo el 27% de los matriculados en Arquitectura e Ingeniería civil son mujeres.
Por ello, es muy importante que implementen políticas que promuevan el acceso de las mujeres a sectores como la construcción, así como garantizar un mayor acceso a la digitalización para ellas. Desde habitissimo subrayan que “la transición digital en la construcción no constituye simplemente un destino final, sino un proceso continuo de mejora y adaptación en las formas de trabajo”. En este proceso, es esencial no dejar de lado las contribuciones de las mujeres, reconociendo su importancia y valor en cada etapa de este viaje de transformación.
